Rainbow Gathering

Lo primero de todo FELIZ AÑO A TODOS!!!

Hoy me gustaría hablar de Estefanía que la dejé en la Rainbow y que estos días me encantó que viniera a Christchurch a pasar las navidades con nosotras. Me enseñó a hacer pulseras, la acompañé a vender, montó su primer tenderete de artesanía y le fue bastante bien la verdad! Los primeros días le costó un poco pero luego ya sobre ruedas. Estuvimos juntas por Chch todo el día metidas en tiendas de segunda mando (sobre todo en la de Manchester St. que poco más y nos hacen descuentos ya). Fuimos juntas a la Rainbow y ahora la echo de menos, porque ella es todo amor y alegría y lo transmite allá donde va. Desde aquí le quiero dar las gracias por estos días en Chch y en la Rainbow (que sin ella no me habría ni enterado de que existe) y desearla que le vaya todo genial que estoy segura de que sí. Nos volveremos a ver seguro, pero aún así quería dedicarle un cachito de la entrada de hoy :) Gracias por ser así nube!

La segunda mención del día va a ser Josh. No, no me he enamorado ni nada por el estilo. El día de nochebuena conocimos a este chico haciendo malabares en la plaza y le invitamos a la cena de nochebuena. Lo que empezó siendo una invitación de una noche se convirtió en la convivencia con él durante 4 días que trajo muchas risas y muchas reflexiones también. Josh es de Colorado (EEUU), tiene 24 años y es un trotamundos, se busca la vida como puede y se gana unas perrillas haciendo malabares con sus mazas. Es anarquista, vive de la calle y no compra comida: la coge de los contenedores de los supermercados y de las papeleras. Lo sorprendente es la de cosas que ha traído a casa de los contenedores y que estaban intactas!! Su filosofía es que en el caso de tener que comprar comida en algún sitio lo hará siempre en aquellos supermercados que no ponen candado a sus contenedores de noche, como muestra de agradecimiento jejejej También encontró camisetas y hasta una sudadera buena!! Nos hizo mirar la vida desde su punto de vista. También porque nunca nos vimos en situaciones extremas de la vida como él. Pero Josh además se hizo querer porque no es una persona nada radical, difícil de tratar, para nada. Es un tío muy majo y muy muy bueno, con un gran corazón. El pobre se sentía mal por estar durmiendo en el sofá de casa y fregaba todos los cacharros y hasta compró una botella de vino para nochebuena. Pasamos unos días geniales con él en el parque o en la plaza con sus malabares, con la artesanía de Estefanía, con la guitarra del holandés que hablaba español con acento gaditano, con la hoguera en la playa... Se fue para la Rainbow y allí le vimos tan pizpireto como siempre :)

Continúo con la Rainbow Gathering. Bueno, no tengo una palabra para definirla porque me quedaría corta pero creo que no voy a vivir nunca nada igual en mi vida. Estefanía et moi nos pusimos a hacer autostop destino Maruia por Lewis Pass (precioso por cierto) a Medio camino entre Christchurch y Nelson, llegando a los Nelson Lakes. Primero nos cogió una kiwi en Christchurch y nos dejó en un cruce porque ella seguía hacia Picton y se desviaba. En ese cruce había el mítico bar de carretera donde nos pedimos un café y té para desayunar y aparecieron dos chicos kiwis y les preguntamos en qué dirección iban y su destino era Murchinson que iban a escalar un pico, un poco más para allá de Maruia así que nos vino perfecto! Una vez que llegamos a la Rainbow me descalcé y os puedo decir que en 3 días que estuve no me puse zapatos ni un solo momento. Sintiendo el barro por los dedos de los pies, sentir la tierra, la hierba...

Estuvimos en un valle en medio de la nada, sin cobertura, sin electricidad ni gas ni nada, solo naturaleza, buena gente (muy variopinta y pintovaria) y muchas sonrisas, compartiendo todo esto con unas 500 personas de diferentes partes del mundo. En el campamento de bienvenida nos gritaron WELCOME HOME y nos invitaron a té caliente.

Nos recibieron con muchos abrazos :) Se podría decir que el saludo de la Rainbow es el abrazo, y no un abrazo cualquiera, sino abrazos bien fuertes, con mucho cariño. Luego en el campamento había tipis, tiendas de campaña, un refugee camp (para aquellas personas que no tienen tienda ni nada) y montamos la nuestra al lado de una chica israelita, un kiwi y unos franceses. Conocimos gente de todas partes, cantamos, nos sentamos alrededor de la hoguera, nos cogimos de la mano, aullamos como lobos a la luna, nos sentimos más vivas, más cerca de la naturaleza y de los animales, y con más energía que nunca. Me sentía como un pececillo en el río, como un pájaro volando, como mogli en el libro de la selva, como un duencecillo travieso... Me sentía totalmente libre.

Esta es la foto para ligar ,-)

Había también montado un teatro, un circo, una panadería con un horno y todo hecho por ellos. Teníamos piscina (el río ,-) que además el agua estaba buenísima), había tipis, fuentes naturales donde rellenar las botellas de agua... y estaban construyendo una estación de radio! La primera noche estuvieron cantando y tocando toda la noche, haciendo pizzas, palomitas con diferentes sabores, alimentando la hoguera para que nunca se apagase... Fue una noche mágica.

Por el día ayudas en lo que puedes, porque la rainbow es una comunidad y todos servimos para algo, ayudamos en algo y contribuimos. Fregamos cacharros, fuimos a rellenar bidones de agua, hicimos té para los que llegaban, cocinamos, cargamos comiga, fuimos a buscar leña para el fuego y la cortamos... Siempre hay algo que hacer. Si te cansas o si quieres cambiar a otra cosa lo dejas sin más, te vas a tirar al prado o a pegarte un chapuzón en el río o a hablar con la gente o a ayudar en otra cosa... Nadie te manda nada, allí nadie manda, todos somos parte. Las comidas eran geniales. Toda la gente se sentaba en un círculo inmenso alrededor del fuego, nos cogíamos de la mano, nos quedábamos en silencio y dábamos gracias a nuestra señora madre tierra por los alimentos, luego nos sentábamos y a comer. Cada uno teníamos nuestros cacharros para que nos sirviesen la comida, la cual se repartía entre todos. No todo el mundo iba a comer al food circle (así es como llaman al círculo de las comidas) pero yo calculo que perfectamente podríamos estar unas 200 personas. Después de comer la gente se ofrecía a enseñarte cosas: masajes, yoga, meditación... O también te invitaban a reunirte para hablar de nutrición, de naturaleza, de lo que sea.

Me gustó compartir estos días con toda la gente y compartir todo aquello. El tiempo estuvo muy bien el primer día pero el segundo llovió bastante y el camino había tramos que era bastante barrizal la verdad pero era divertido, me recordaba a humor amarillo porque había un cacho en el que había mucho barro y piedras grandes para ir saltando que parecían zamburguesas. En fin, a mí hasta me prestó la lluvia y el barro, total, sin zapatos, qué mas da!

Por cierto, llevé a la Rainbow un palo de lluvia que me olvidé en el coche de los kiwis. Pues de la que volvían de escalar pararon a una chica y le preguntaron si iba a la Rainbow, como iba le dieron mi palo de lluvia diciéndole que se lo habían dejado unas chicas españolas. Bueno pues la chica en la primera cena (a la que llegamos tarde) contó la historia del palo de lluvia y todo el mundo conoció mi palo pero yo no estaba! Después cuando llegamos vi a un chico jugando con él y me acerqué y ya me contaron toda la historia y que a la gente le había encantado, pá mí que ya se estaban hasta rifando el palo si yo no aparecía jejejej.

Volví a la ciudad (también haciendo autostop) para celebrar año nuevo, 2010, con ana y con la gente, cenar todos juntos (comida brasilera, libanesa, uruguaya, koreana, española...)

Ir a la plaza de la catedral, hacer la cuenta atrás, ver los fuegos artificiales, llorar... No sé allí pero aquí fue Nochevieja, fue luna llena y eclipse de luna! Un día especial desde luego :)

Pero bueno, por lo demás la fiesta y tal fue como cualquier otro fin de semanas y eso de no estar en temporada de uvas y no poder tomarlas me dio un poco de pena... Hoy me levanté y aunque no pude verlo en vídeo, escuché las campanadas por internet en TV1 y hablé antes y después con Sary, Carmen, Vivo, Nati, Tiby y Noe, Nachín... Que me sacaron entre todos las lágrimas :___) Y desearles un feliz año nuevo!! A ellos y a todos los que estéis leyendo esto ahora!! A sonreír todo el año!!

Os quiero mucho!!

Feliz 2010, cuidaros mucho, pasarlo bien y disfrutad!!

PD. Mamá, el turrón y las yemas triunfaron en la cena jejeje Una pena que en la aduana se hayan quedado con el jamón... Maditos!!

PD2. Me acribillaron las sunflies en tobillos y brazos :( Ni con repelente! Será posible! Y no es una picadura como la de los mosquitos... Ojalá! Pica mucho mucho mucho y es una picadura más grande!! El caso es que las sunflies parecen inofensivas pero no!! Huíd de ellas!!